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Los galones de Gala

By on 24 septiembre, 2014

Gala Leon capitana davisGala León es la nueva capitana de Copa Davis. La primera de la historia en el Grupo Mundial. Y, como sabemos, se ha armado la marimorena. No faltan opiniones que la juzgan poco capacitada para el cargo, otras señalan lo ‘impropio’ –en su opinión- de una mujer como entrenadora de un equipo masculino, aludiendo a la incomodidad de compartir vestuario, mientras también se señala que se debió haber consultado a los implicados. Es decir, a los jugadores.

Sin embargo, quizá la designación de Gala León no sea tan descabellada como implican estas opiniones. Por un lado, el equipo ha caído en la rutina. Por el otro, hay muy poca cera además de la que ahora arde. Hace un año, el cargo fue a manos de un grande del tenis, conciliador y amigo del pacto y el convencimiento. El resultado lo hemos visto y a su luz, poco puede sorprendernos que el bueno de Carlos Moyá no quiera seguir porque tiene razón: si en un grupo que se supone que comparte objetivos no van todos a una es muy difícil sacar nada en claro e ir de Quijote es digno, pero infructuoso.

¿Por qué no gusta Gala? ¿Porque no tiene historial? Muy pocos entrenadores tienen palmarés superior al de sus pupilos ¿Algunos tendrían a menos ser dirigidos por una mujer? No quisiérmos que eso fuera cierto. Gala ha dicho que no recibió apenas respuesta al nombramiento por parte de ‘los chicos’, pero eso entra más en el campo de las formas, de que se te vayan las cosas de la cabeza, o de no sentir como propias unas estructuras a las que se supone que tú también perteneces, y quizá ahí esté el problema.
Gala Leon capitana davis2
En la Copa Davis cuenta mucho ‘el hambre’: ahí tenemos ahora mismo a Federer, que lo ha ganado todo menos la Ensaladera. El equipo nacional de Copa Davis ha dado mucha gloria a nuestro deporte, pero los días de la generación que lo consiguió están próximos a pasar y su continuidad no parece sencilla. Está dicho: miremos la edad de nuestros ‘top 100’. La generación triunfal de nuestro tenis se acerca al ocaso de sus carreras y entra dentro de la lógica humana que den la Copa Davis por asignatura aprobada. La generación que debe tomar su relevo es, de momento, escasa. Nuestro único ‘top 100’ menor de 25 años es Pablo Carreño (23) y después hay que bajar hasta más del puesto 200 para encontrar otro: Andrés Artuñedo. El equipo del futuro no será lo mismo que del pasado y esta situación obliga a un cambio de planteamiento en la forma de llevar el equipo.

Hora es, pues, de pensar en el futuro. No es cosa de formar un equipo con gente forzada porque los resultados se resienten, pero sí de encontrar un equilibrio entre las necesidades del equipo (resultados) y las de los jugadores (planificar sus temporadas profesionales). Sea como fuere, el caso es que cuando la rutina y el marasmo invaden algo, no está de más dar un golpe en la mesa para que la gente se despierte, y parece que de momento así ha sucedido.

El uso que Gala haga ahora de sus galones pertenece al futuro y de aquí a julio queda mucho tiempo. Y desde luego, dejar al equipo descabezado, darle la capitanía a alguien sin ilusión o a quien se le hiciera pesado ir a Rusia, o a quien simplemente le tocara por así decirlo el turno, no parecen buenas decisiones en este estado de cosas.

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