Análisis: Babolat Pure Strike 100
Babolat en su 150 aniversario presenta la cuarta generación de la Pure Strike 100, una gama de raqueta que llega con una propuesta más sobria, más conectada y diseñada para el jugador agresivo que construye puntos con determinación. El nuevo diseño en gris metalizado marca un cambio estético importante, pero lo que realmente importa está en el interior: tecnologías que mejoran la sensación, el control y la estabilidad sin perder la esencia ofensiva de la Pure Strike.
Diseño
La Pure Strike 100 abandona el blanco brillante de sus predecesoras y apuesta por un gris mate metalizado que transmite elegancia y madurez. Los detalles en blanco y rojo mantienen el carácter competitivo, pero el conjunto visual es más profesional y menos juvenil.

A nivel técnico, el marco sigue siendo híbrido (Control Frame Technology), con perfil de 21/23/21 mm y construcción en grafito. El peso se mantiene en 300 gramos, con un balance de 320 mm que favorece la maniobrabilidad. El patrón de encordado 16×19 ofrece una buena combinación entre spin y control.

La gran novedad es la incorporación de NF²-Tech, una tecnología que utiliza fibras naturales de lino en el marco y el mango para filtrar vibraciones y mejorar el sonido del impacto. El resultado: una sensación más óptima, mejor impacto y menos agresiva para el brazo.

Prueba en pista
Desde el primer golpe, la Pure Strike 100 transmite una sensación más suave y táctil que la versión anterior. El impacto es más profundo, menos seco, y el sonido más amortiguado. Se nota el trabajo de Babolat en mejorar la experiencia sensorial sin perder reactividad.

Desde el fondo: permite construir puntos con variedad de alturas y efectos. El patrón 16×19 ofrece buen acceso al spin sin perder control. En la red: maniobrable y precisa, con buen control de bola y fácil salida de efectos Servicio y resto: buena capacidad para colocar y variar el ritmo de juego, muy precisa dando un plus al iniciar jugadas.

Conclusión
La nueva Babolat Pure Strike 100 hemos podido comprobar que es más cómoda que su antecesora, con menos vibraciones y mejor conexión con la pelota, una raqueta pensada para jugadores ofensivos que construyen puntos con intención, ritmo y variedad. Su diseño gris metalizado refleja su carácter técnico y elegante, mientras que sus tecnologías ofrecen una experiencia más conectada y precisa en cada golpe. ideal para quienes valoran el control vanguardista con sensaciones clásicas. Si tu juego se basa en precisión y construcción táctica, esta puede ser tu mejor elección .














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