Copa Davis: surrealismo total y soluciones

By Miguel Ángel Zubiarrain Revista Tenis Grand Slam on 23 octubre, 2014

El asunto de la Copa Davis es una serie de despropósitos total y absoluta. Todo se ha hecho mal desde el principio y puede acabar como el rosario de la aurora.

Gala León, directora técnica de la Real Federación Española de Tenis, es nombrada capitana por el Presidente de la Federación en un arrebato por la renuncia a jugar en Sao Paulo y la consiguiente derrota de España. Tomas decisiones en caliente no es bueno, hay que contar hasta 10 primero.

Gala acepta el reto. Lo malo es que los meses que llevaba como directora técnica no había hablado con ningún tenista, ni se había acercado a las pistas para verles jugar. Es más ni se había interesado por cómo iba Rafael Nadal de su lesión en la muñeca.

Los jugadores se enfadan porque nadie les ha consultado, y no creen ni ellos ni sus entrenadores que esté preparada para el cargo. Sale a relucir el tema de que es mujer y de que será difícil compartir vestuario con los hombres del equipo, aunque en el fondo esto es pura anécdota.

Durante el Valencia Open 500 se reúnen Gala León y los jugadores. Desacuerdo total, aunque Gala salga diciendo de la reunión que todo bien y que no se va a ir por ser mujer. En esto tiene razón pero los jugadores, aunque casi todos perdieron sus razones al borrarse de ir a Sao Paulo, pueden tenerla en que no esté cualificada para el cargo. El Presidente de la RFET ni se arrima a ninguna disputa. Mala postura porque son momentos de dar la cara.

Situación límite y delicada para todos porque para subir al Grupo Mundial habrá que ir a Rusia después de Wimbledon y la eliminatoria es más que complicada. Se puede ganar, pero también se puede perder aunque fueran los mejores jugadores. Desde luego, está claro que hay que nominar a los mejores para cada eliminatoria, y que quien no quiera ir, debe alegar sus motivos. Aquí tendrían la palabra la RFET y el CSD, para aceptarlos o tomar medidas.

¿Qué se puede hacer para desatascar la situación? Si yo fuera Gala León haría lo siguiente: retirarme al segundo plano y pedir al Presidente que nombre otro capitán, de acuerdo a los jugadores. En esa situación, creo que ninguno podría negarse a jugar, siempre que no haya lesiones.

Será un partido duro, jugando en Rusia contra Youzhny, Tursunov, Gabashvili, etc. Si se gana España volvería al Grupo Mundial, y todos contentos. Porque además Gala León quedaría como una Señora por renunciar al cargo por el bien de España. Pero si se pierde, quedará claro que el equipo necesita un cambio de concepto. Y entonces sí que le daría su oportunidad a Gala, que en este año podría ponerse al día en el tenis masculino cumpliendo su papel de Directora Técnica.

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